Sistema Nacional de Planificación de Cuba

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Planificación de largo plazo: PNDES 2030

Formulación

El VII Congreso del Partido Comunista de Cuba (PCC) celebrado en abril de 2016 aprobó las Bases del PNDES 2030, que estableció las prioridades de desarrollo para el país. Para elaborar este documento se realizó un amplio proceso de consulta popular con directivos y representantes de las organizaciones sociales y de diversos sectores de la sociedad civil cubana. El mismo fue aprobado en mayo de 2017 por el III Pleno del Comité Central del PCC y respaldado por la Asamblea Nacional del Poder Popular el 1° de junio de 2017. Con ello concluyó la primera etapa de la elaboración del PNDES 2030 (ver Figura 1).

Figura 1: Fases de la Elaboración del PNDES 2030

Figura 1
Fuente: MEP

En septiembre de 2017, se emitió el Decreto Presidencial No. 19, que sentó las bases para la organización de la segunda etapa del proceso de elaboración del PNDES 2030 (implementación).

De acuerdo con este documento –actualizado en 2018 a través del Decreto Presidencial No. 28– la Comisión Gubernamental a su cargo quedó integrada por un Grupo de Dirección, un Grupo Coordinador y nueve Grupos de Trabajo asociados a los Ejes Temáticos definidos en las Bases del PNDES 2030.

En julio de 2020 se aprobó el PNDES 2030 y en la actualidad se trabaja en su implementación.

Como parte de la elaboración del PNDES 2030 y su articulación con la Agenda 2030, se construyeron las matrices de correlación entre los objetivos generales y específicos de las diversas áreas de desarrollo del PNDES 2030, los Lineamientos de la Política Económica y Social y los ODS, así como los indicadores propuestos en la Agenda 2030, lo cual constituyó un insumo básico para los análisis que se desarrollaron en los nueve grupos de trabajo.

Implementación

Según lo preestablecido para esta etapa corresponde:

1. Macroproyectos, programas y proyectos:

Para la nueva etapa 2020-2030, se introduce en el país un sistema de gestión de gobierno para la implementación del PNDES 2030 y la Agenda 2030, que integra –con un enfoque multidimensional– las estrategias, políticas y acciones de cada uno de los seis Ejes Estratégicos del PNDES 2030, expresados en macroprogramas que se articulan con los objetivos y metas de la Agenda 2030.

Este sistema de trabajo contribuye a alinear visiones con respecto a las prioridades, focalizando la atención en las principales problemáticas nacionales y no en las funciones y competencias de las instituciones.

Ello facilita la coordinación y coherencia de las políticas y acciones y permite ofrecer soluciones desde las diferentes dimensiones del desarrollo, con un mayor grado de integralidad, transversalidad y enfoque estratégico. Como resultado, se construye una institucionalidad más eficaz, inclusiva y transparente, con mayores niveles de participación de todos los actores de la sociedad.

2. Identificación de demandas presupuestarias y fuentes de financiamiento disponibles

Seguimiento y Evaluación

Según lo preestablecido para esta etapa corresponde:

1. Establecimiento de mecanismos de monitoreo y evaluación

2. Formulación de metas cuantitativas y determinación de indicadores de evaluación de objetivos

Vinculación con la planificación territorial

En Cuba, los gobiernos territoriales trabajan en la implementación de la Agenda 2030 y el PNDES 2030 en conjunto con el resto de los actores de la comunidad, con el gran desafío que significa actuar desde una visión integrada, multidimensional, interinstitucional e interdisciplinaria del desarrollo local, en correspondencia con el enfoque de desarrollo sostenible.

La Constitución de la República de Cuba de 2019, al reconocer el principio de autonomía municipal, convoca a la ampliación de la capacidad decisoria de los municipios y crea las bases jurídicas para que pueda alcanzarse mayor promoción y realización del desarrollo local, precisamente en el espacio de poder público político más cotidiano y cercano al ciudadano. Atribuirle al municipio un espacio de actuación propio, capacidad de decisión y recursos suficientes (humanos, materiales y financieros), contribuirá a la funcionalidad municipal y, por esa vía, a la gobernabilidad.

A su vez, la aprobación en el Consejo de ministros en julio de 2020 de la Política para impulsar el Desarrollo Territorial, como parte del PNDES 2030, fomenta la creación de condiciones para una mejor gestión de los territorios que impacte positivamente en el bienestar de las personas, bajo el principio de no dejar a nadie atrás.

La EDM (Estrategias de Desarrollo Municipal) constituye un instrumento articulador que permite, de conjunto con los planes de ordenamiento territorial y urbano, integrar la gestión pública local y generar consenso en torno a las prioridades y potencialidades del territorio, contextualizando cada acción a sus características; con la motivación principal de generar bienestar y prosperidad de las personas sobre bases sostenibles.

Al mismo tiempo, facilita la organización de un sistema de gestión que vincula los intereses nacionales (PNDES 2030 y ODS), provinciales y municipales, aprovechando los recursos endógenos y exógenos y la articulación entre los diferentes actores, territorios y niveles.

Fuente de la información: Informe Nacional Voluntario Cuba 2021 sobre la Agenda 2030, 2021

 

Planificación de corto plazo: Plan de la Economía Nacional Anual

El Plan de la Economía Nacional Anual es el instrumento de planificación de corto plazo del país.

La elaboración de estos planes se sustenta en las “Las Indicaciones Metodológicas para la elaboración del Plan de la Economía Nacional”. Dichas Indicaciones son objeto de revisión anualmente, en atención a las transformaciones que se suceden en el sistema de dirección en correspondencia con la actualización del modelo economía social y los Lineamientos de la Política Económica y Social del Partido y la Revolución, aprobados en el VII Congreso del Partido Comunista de Cuba.

En las Indicaciones Metodológicas en cuestión se inscribe la participación en la elaboración del Plan de la Economía Nacional de los organismos de la Administración Central del Estado, las Organizaciones Superiores de Dirección Empresarial, los Consejos de la Administración Provincial, el Consejo de la Administración Municipal Isla de la Juventud y otras entidades económicas, puntualizando la información y base cálculo a brindar por cada uno de ellos, entre otras cuestiones, el flujo de tareas y coordinaciones que se generan, así como el cronograma de trabajo para su cumplimiento.

La elaboración es coordinada por el MEP, y el documento final es presentado a la Administración central del Estado y luego se somete a consideración de la Asamblea Nacional del Poder Popular.

El monitoreo de la ejecución del Plan corresponde a los organismos globales y rectores de actividades, basándose en la información estadística que brinda periódicamente la Oficina Nacional de Estadísticas e Información (ONEI) y demás fuentes nominalizadas para aspectos puntuales, en lo que se inscribe el Banco Nacional de Cuba (BNC) entre otros.

A través de la información que brinda periódicamente la ONEI y demás fuentes nominalizadas, así como por las valoraciones efectuadas por los organismos globales y rectores, el MEP realiza análisis integrales que le permiten arribar a consideraciones sobre la marcha de la economía, situándolo en condiciones de hacer propuestas colegiadas con el resto de los factores involucrados a las instancias del Gobierno Central, para corregir posibles desviaciones con respecto al Plan.